Eva María Sáenz: “El abogado bioeticista debe estar abierto al diálogo intercultural”

 

 

 

 

El debate jurídico y político en torno al derecho a la consulta previa ocupa la atención de distintos sectores de la sociedad, en donde las diferentes posturas, como es natural, pretenden privilegiar sus intereses.

 

Sin embargo, la propuesta que desde la Bioética hace la abogada Eva María Sáenz busca el equilibrio entre las expectativas de una sociedad construida sobre una particular noción de progreso y el respeto por los derechos de poblaciones tradicionalmente discriminadas.

 

ÁMBITO JURÍDICO: ¿Cómo se relaciona la Bioética con el ejercicio del Derecho?

 

Eva María Sáenz: La Bioética ha surgido para construir un puente entre las ciencias experimentales y las humanidades, como una metodología  que permite dirimir los dilemas éticos que se presentan en el campo social. El bioeticista ha de ser, en esencia, un librepensador, capaz de abordar los conflictos de manera imparcial mediante un análisis libre de prejuicios y preconcepciones.

 

Á. J.: ¿Cuál es el aspecto que debe ocupar la atención de los abogados con esta formación?

 

E. M. S.: El abogado bioeticista debe estar abierto al diálogo intercultural, al reconocimiento y respeto del otro en la diferencia, siendo la dignidad humana el valor central de sus disertaciones. Ello implica una mirada inclusiva de poblaciones históricamente discriminadas.

 

Á. J.: ¿Qué utilidad le ha traído la Bioética a su trabajo con grupos étnicos?

 

E. M. S.: La práctica jurídica desde la Bioética va más allá de un ejercicio hermenéutico normativo, pues exige el desarrollo de habilidades analíticas, ya que lo esperable jurídicamente, muchas veces, resulta ser una limitante.

 

Á. J.: ¿En la formación de abogados se han incorporado criterios de diversidad cultural e interculturalidad?

 

E. M. S.: Es probable que las universidades hoy estén más preocupadas por incluir este tipo de contenidos en sus programas académicos. Sin embargo, esto no es suficiente para pasar del discurso a la realidad, sobre todo del enfoque de derechos para la atención diferencial de los grupos étnicos.

 

Á. J.: ¿En la carrera judicial se respeta la diversidad cultural?

 

E. M. S.: Quizás de manera formal, pero, en la práctica, aún se evidencia desconocimiento de los contextos y derechos de los grupos étnicos, posturas discriminatorias e irrespetuosas de su dignidad, basadas, muchas veces, en prejuicios por parte de las personas que, entre otras, ejercen una función pública.

 

Á. J.: En el caso particular de la educación, ¿qué hace el Estado para garantizar ese derecho a los grupos étnicos?

 

E. M. S.: El Estado viene acompañando a las comunidades étnicas en el proceso de formulación, diseño, implementación, ajuste y expansión de los proyectos educativos comunitarios, propios e interculturales, los cuales se basan en sus planes de vida.

 

Para ello, la participación activa de los integrantes de cada comunidad es un criterio primordial para que el contenido del modelo de educación represente y respete su identidad cultural.

 

Además, el Estado viene apoyando procesos de concertación para la construcción del Sistema Educativo Indígena Propio, la formulación del Conpes Integral Indígena y de la reglamentación del artículo 56 transitorio de la Constitución, así como de la construcción de la Política Pública de Comunicación Indígena, entre otros.

 

Á. J.: ¿Es necesario reformar el procedimiento de consulta previa?

 

E. M. S.: A pesar de los evidentes avances, aún hay temas de fondo de este derecho fundamental ante los cuales el Gobierno no debería continuar haciéndose “el de la vista gorda”. Resulta pertinente señalar que la reglamentación de la consulta previa se encuentra inmersa en el debate bioético entre posturas que defienden la explotación y mayor provecho de los recursos naturales y las conservacionistas del medio ambiente, fundamento de los planes de vida de muchos de los grupos étnicos colombianos.

 

 

Eva María Sáenz Pulido

 

Estudios realizados: abogada de la Universidad Externado, con especialización y maestría en Bioética y estudios complementarios en derechos humanos y diplomado en formación y capacitación de conciliadores.

 

Cargos desempeñados: fue coordinadora jurídica de la Dirección de Consulta Previa del Ministerio del Interior y abogada asesora en la Sugerencia de Promoción, Seguimiento y Asuntos Étnicos del Incoder. También ha sido asesora y consultora de la Defensoría Delegada para los Derechos de la Niñez, la Juventud y la Mujer, entre otras actividades.

 

Ocupación actual: abogada asesora del equipo de atención educativa a grupos étnicos de la Subdirección de Fomento de Competencias del Ministerio de Educación Nacional.