Montaña rusa en la cotización del dólar

Jorge Arango Velasco

Profesional en Finanzas de la Universidad Externado de Colombia

Magíster en Finanzas de la Universidad de Murcia

Actualmente, se presenta una alta volatilidad en el precio del dólar con una tendencia positiva en su cotización, llegando a máximos históricos en la Tasa Representativa del Mercado (TRM) con una marca de 4.627 pesos por dólar, ocurrido el pasado 13 de julio.

Varios son los factores que han influido en este comportamiento, tales como los resultados electorales del pasado 19 de junio, la actual guerra en Ucrania y la crisis global de la cadena de suministros. Sin embargo, la principal razón tras el aumento del precio del dólar está intrínsecamente relacionada con los auxilios económicos realizados por las grandes economías mundiales, como EE UU, para combatir la pandemia del covid-19, lo que generó una altísima inflación.

En estos momentos, los bancos centrales, como la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), han actuado agresivamente y han subido las tasas de interés a un ritmo acelerado, en un intento por combatir la inflación, aunque esto también alimente la preocupación de una recesión mundial.

Estos movimientos al alza de la tasa de interés por parte de la FED es lo que, en últimas, ha generado las abruptas volatilidades de la tasa de cambio en el país. Por ejemplo, el pasado mes de junio, la Reserva Federal incrementó la tasa de interés en 75 puntos básicos (es decir 0,75), ubicándola en valores de 1,75 %, el incremento más pronunciado desde 1994. Desde entonces, la desvalorización del peso frente al dólar llegó a máximos de 16,29 %, pasando de una TRM de 3.979,3 pesos por dólar, el 15 de junio, a una TRM de 4.627,46, el 13 de julio.

Esta valorización del dólar no solo se presentó frente al peso colombiano, por ejemplo, el dólar alcanzó la paridad frente al euro durante el mes de julio, situación que no sucedía hace más de 20 años, cuando el euro se lanzó al mercado. La situación se repite en países como Perú, Chile, Brasil, México y, en general, en la mayoría de Latinoamérica. Monedas como el sol peruano presentaron una desvalorización promedio del 6,5 % frente al dólar para el mismo periodo analizado y el real brasilero, una desvalorización cercana al 7,0 %. El peso chileno, por su parte, obtuvo una desvalorización frente al dólar del 17,84 %.

A medida que los bancos centrales han incrementado la tasa de interés en los países desarrollados, esto ha impulsado a los inversionistas a abandonar los países en vía de desarrollo, donde los riesgos son mayores. El éxodo de estos inversionistas ha intensificado la caída del valor de las monedas de estos países, lo que provoca que las empresas y los hogares deban pagar más por los productos importados.

Como respuesta a las medidas interpuestas por los bancos centrales de las grandes economías, el Banco de la República ha implementado las mismas acciones de política económica de incrementar la tasa de interés, ubicándola en el mes de julio en valores del 7,5 %, estabilizando la TRM por los 4.300 pesos por dólar, pero con el riesgo de una desaceleración económica, pues se encarece el crédito y se desestimula el consumo en el país.

Mientras las grandes economías continúen con sus agresivas políticas de incremento de la tasa de interés frente a la lucha de la actual inflación global, se mantendría la desvalorización de aquellas monedas de países en vía de desarrollo, incluyendo el peso colombiano.

De igual manera, la presente tensión local por el inminente cambio político, el próximo 7 de agosto, ha provocado que distintos fondos de inversión detengan sus inversiones en el país y que ciudadanos colombianos demanden cada vez más la moneda americana para salvaguardar sus ahorros en caso de comportamientos adversos de la economía local.

Todos estos movimientos, sin duda, intensificarán la pérdida de valor del peso colombiano, lo que nos lleva a preguntarnos si, en esta montaña rusa de subidas y bajadas, aún nos hace falta una de las alzas más inquietantes del precio del dólar en la historia de Colombia.