Más de 23 años de prisión al excongresista César Pérez García por homicidio de exalcalde de Remedios (Antioquia)

Con una pena de 279 meses de prisión y una accesoria de interdicción de derechos y funciones públicas por 10 años, la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó al excongresista César Augusto Pérez García como determinador del homicidio de Elkin de Jesús Martínez Álvarez, alcalde electo de Remedios (Antioquia).  Igualmente, dispuso negar al sentenciado la condena de ejecución condicional y prisión domiciliaria. Una vez en firme la determinación deberá librarse orden de captura en contra del cuestionado para el cumplimiento de la pena privativa de la libertad impuesta.

Pérez García, quien nació en Remedios (Antioquia), actualmente tiene 89 años de edad y su profesión es abogado, fungió como Representante a la Cámara por el departamento de Antioquia en los períodos constitucionales 1974-1978, 1978-1982, 1982-1986, 1986-1990, 1990-1991 y 1991-1994, actuando ininterrumpidamente hasta el 10 de marzo de 1994, cuando el Consejo de Estado decretó la pérdida de su investidura parlamentaria.

Los hechos que originan la decisión se relacionan con la violencia política registrada en 1988 y la pérdida del poder del excongresista en los municipios del nordeste antioqueño, entre ellos Segovia y Remedios, cuyos espacios estaban siendo ocupados por la Unión Patriótica. Según la investigación, el cuestionado se contactó con los paramilitares de Fidel Castaño y Henry de Jesús Pérez, jefes del grupo armado ilegal autodenominado “Muerte a Revolucionarios del Nordeste”, a quienes les solicitó expulsar a sus líderes de esa región.

Estos, a su vez, acudieron a Alonso de Jesús Baquero Agudelo, alias “Vladimir”, quien en cumplimiento de dicha orden se dedicó a perseguir a quienes el excongresista consideraba sus contradictores políticos, mediante amenazas de muerte. En ese contexto, se registró el homicidio de Elkin de Jesús Martínez Álvarez el 16 de mayo de 1988, cuando estaba en la puerta de un hotel en la ciudad de Medellín esperando un taxi.

El alto tribunal recordó que, de acuerdo con su jurisprudencia y en apoyo de las definiciones normativas de la ley penal sustancial tanto de 1980 como del año 2000, en la medida que aluden a las mismas categorías jurídicas, el determinador es quien hace nacer en otro la idea de llevar a cabo una conducta punible y dicha determinación puede ser directa con el ejecutor material o indirecta a través de una cadena de determinaciones (M. P. Ariel Augusto Torres Rojas).

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