Construcción, diversidad e inclusión como ejes de la reactivación económica

El sector de la construcción es uno de los más grandes de la economía colombiana, por eso su rol determinante en la reactivación que vive el país.

Recientemente, el Dane anunció que, durante este segundo periodo del 2021, 1.643.790 de colombianos fueron empleados en construcción y actividades inmobiliarias, lo que representa una tendencia positiva.

En nuestro caso específico, desde el 2019 hasta el 2020 registramos un incremento del 26 % en nuestras ventas, rompiendo récords durante tres meses seguidos, en medio de la complejidad de la pandemia. Estos repuntes estuvieron relacionados con proyectos urbanísticos en Bogotá (Colina Campestre y Montevideo) y, en especial, un proyecto de vivienda de interés social de renovación urbana que cerramos en 10 meses. Para este 2021, los retos han sido mayores: aportar a la reactivación desde la generación de empleo, demanda de insumos de construcción y generación de valor agregado.

Por eso, es imperativo reactivar la ciudad a través del sector de la construcción desde proyectos de vivienda e infraestructura, porque creemos que la reactivación y el aceleramiento garantizan una mejor calidad de vida, por medio del mejoramiento urbano compuesto por un esquema vial con ciclorrutas y reverdecimiento, lo hemos aprendido durante 65 años de historia.

Pero, además de construcción, hay dos pilares que considero importantes en esta reactivación económica que vive el país: la diversidad y la inclusión. Destaco en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de Bogotá el enfoque de género, que han titulado “La ciudad de la mujer y el cuidado después del maltrato y la indiferencia”, una apuesta digna de una ciudad incluyente que coincide con nuestro sentir empresarial.

Otro punto relevante para exponer sobre el POT es que, si bien prioriza la renovación, también limita las zonas de expansión para la ciudad, propuesta que encarece el costo de la vivienda, ya que no habría suficiente suelo disponible para construir. Allí es cuando las zonas anteriormente industriales o de bodegaje se renuevan.

Por último, considero importante hablar desde la diversidad de las ciudades, en donde cada aporte, individual y colectivo, contribuye con la transformación social a través de los modelos urbanos.

Bogotá sigue creciendo, en medio de procesos de ordenamiento cada vez más inclusivos y viables para ciudadanos que merecen espacios que se mejoran urbanísticamente. Como actor clave en la industria, podemos garantizar que seguiremos generando empleo en diferentes proyectos.

Álvaro Peláez, gerente general de la constructora Cusezar