“Las herramientas digitales acercan la justicia al ciudadano”

La congestión judicial, que repercute directamente en el tiempo de resolución de los trámites, es un problema sobre el que no se han tomado medidas eficaces, por varias razones, entre ellas, la falta de presupuesto.

 

Sin embargo, el Juzgado 13 Civil del Circuito de Medellín, por iniciativa propia, ha implementado algunas prácticas digitales que incluyen la divulgación de sus providencias y la elaboración de contenidos para redes sociales, en las que, además, se desarrolla una función pedagógica. María Clara Ocampo, titular del despacho, explica los resultados de estas medidas.

 

ÁMBITO JURÍDICO: ¿Cuál ha sido su experiencia en la Rama Judicial?

 

María Clara Ocampo: Comencé como empleada de un juzgado civil del circuito en el 2001, antes de culminar mi carrera. En esa época, el uso de la tecnología se limitaba a dos o tres computadores por despacho y el resto de empleados debíamos usar máquinas de escribir. He presenciado desde distintas perspectivas la evolución lenta y precaria de la Rama Judicial, como la implementación de las TIC en el ejercicio judicial, en principio, con el sistema siglo XXI.

 

Á. J.: Durante su ejercicio profesional, ¿cuáles han sido los principales problemas que ha observado en la administración de justicia?

 

M. C. O.: La resistencia al cambio. En la justicia no es sencillo implementar una variación relevante. Por alguna razón, los servidores judiciales suelen resistirse, a través de (i) la obstinación con la que algunos desechan la petición de recibir una prueba testimonial a través de videollamada, pero prefieren aplazar la audiencia bajo el ropaje de una supuesta imposibilidad de practicar la prueba en la fecha establecida; (ii) la falta de un verdadero juez-director del proceso, de cara a la abulia de algunos abogados para llegar a la resolución del conflicto; (iii) la ausencia de sentido social, tanto de abogados como de funcionarios, y (iv) la falta de recursos para la implementación de las TIC, donde urge la puesta en marcha del expediente digital.

 

Á. J.: ¿Cuál debería ser el papel de las TIC y otras herramientas digitales en la función judicial?

 

M. C. O.: La más elemental, pero no menos importante: facilitar el acceso a la justicia de los usuarios. También acercar el usuario al juzgado, que conozcan nuestras prácticas y, de esta manera, puedan ejercer control social sobre la misma.

 

Á. J.: ¿Cómo ha implementado herramientas tecnológicas en su despacho?

 

M. C. O.: Los juzgados, en general, no contamos con suficientes recursos; inclusive, la coordinación de una audiencia por medio de videoconferencia requiere de un mes de antelación. Estamos implementando el envío del archivo de la audiencia a través de correo electrónico, para que las partes ahorren costos y tiempo. También, algunas “plantillas” para ciertas providencias, que puedan ser subidas al “Tyba” y, así, el abogado no siempre deba desplazarse hasta los juzgados a revisar el expediente. Sin embargo, no todas las providencias permiten este método.

 

En nuestra cuenta de Instagram, publicamos diariamente los estados y traslados. Creamos un grupo de difusión de WhatsApp, en el que diariamente enviamos los estados y traslados, y las providencias notificadas. Además, realizamos las notificaciones de las providencias a través de escaneo de autos y sentencias en acciones constitucionales y hacemos el archivo digital de las providencias y demandas.

 

 

Á. J.: ¿Qué resultados ha obtenido su despacho con estas herramientas digitales?

 

M. C. O.: Reducción en la afluencia de público en el despacho, optimizando el tiempo de los empleados y de abogados, y satisfacción de los usuarios con el servicio prestado, evidenciados a través de los comentarios positivos en redes sociales, que alientan la iniciativa. Producto de esta dinámica, han llegado estudiantes de Derecho interesados en las audiencias y para ofrecer su judicatura.

 

Á. J.: En el Instagram del juzgado (@juez13civilcircuito) están disponibles varios videos en los que se explican algunos procesos judiciales, específicamente en el área civil, ¿cómo contribuye a la pedagogía jurídica este aporte del despacho?

M. C. O.: El enfoque de esta iniciativa es el usuario y futuros usuarios, por lo que pretendemos compartir de forma más didáctica los diferentes trámites judiciales.

 

Es usual que al juzgado se acerquen algunos abogados, generalmente recién egresados, a preguntar por la manera como se hace una notificación personal, sus formatos y técnicas.

 

También pareciera elemental, para un juez, la forma de proceder para la entrega de un título judicial, pero los constantes e infortunados acontecimientos respecto al extravío de estos recursos me hicieron pensar en la necesidad de explicar este tema.

 

Á. J.: ¿Qué recomendaciones les daría a los demás funcionarios para que se interesen por el uso de las redes sociales en su trabajo?

 

M. C. O.: Que avancemos al ritmo del mundo, que miremos con optimismo el futuro. Es necesario que humanicemos nuestra función. No somos simples aplicadores de ley, sino funcionarios al servicio de una persona que reclama una solución a su conflicto.

 

María Clara Ocampo

 

Estudios realizados: es abogada de la Universidad de Medellín, especialista en Derecho Administrativo de la Universidad Santo Tomás y en Derecho de los Seguros de la Universidad Javeriana. También es especialista en Derecho Privado y magistra en Derecho de la Universidad Pontificia Bolivariana y candidata al Doctorado de la Universidad de Salamanca (España).

 

Cargos desempeñados: tiene 18 años de experiencia en la Rama Judicial y se ha desempeñado como escribiente, sustanciadora, secretaria de juzgado, auxiliar de magistrado, juez municipal y del circuito, así como magistrada de tribunal.

 

Ocupación actual: Jueza 13 Civil del Circuito de Medellín.